
Momentos
Encontrar momentos es una tarea difícil, requiere de prestar atención a lo que deseamos y lo que nos sucede. Además ambas situaciones deben coincidir en un tiempo y espacio preferentemente placentero. Sin ánimos de ingresar al mundo místico ni de la meditación, Cinematique Abasto te permite estar presente en ese “aquí y ahora” que tanto necesitamos en los tiempos que corren.
Conectar con el espacio, con quien nos rodea, también nos permite conectar con uno mismo, desde niña, cuando salíamos de la ciudad con mis papás y veíamos casas en el campo o recorríamos pueblos alejados me preguntaba: ¿cómo vivían esas personas? ¿qué hacían, cuáles eran sus hobbies?
Nunca se me ocurrió preguntarme lo mismo de mi vecino, siempre de lo hice de lo desconocido; pero resulta que en la esquina de mi casa vive mucha gente que no conozco, con gustos, amores, ganas y sentimientos parecidos a los míos, pero otros.
Al llegar al espacio Roseti, a tres cuadras del famoso centro comercial del Abasto, nos invitan a sentarnos en la calle, mirando hacia la entrada, disfrutando del aire libre y, debo admitir, del frío que comienza a llegar a Buenos Aires. Tras la bienvenida y la invitación a los transeúntes para sumarse al momento artístico (reflexivo) comienza a sonar una música que proviene del interior del edificio. La gente que pasa por la calle se acerca, se aleja, pasa caminando delante y detrás nuestro según su interés de formar parte o alejarse de presentes.
Mientras suena la música suenan los motores de los autos y motos que pasan irrumpiendo (o más bien formando parte d/) el momento. Las voces comienzan a sonar sobre la música, las tres mujeres se hacen visibles mientras nos cantan y hablan sobre los encuentros, los momentos. Nos hablan a nosotros, a ellos, con ellos, con nosotros. Hacen partícipe a todo aquel que se encuentra caminando por la cercanía y nos demuestran que todos estamos en ese mismo tiempo y espacio para ser completos desconocidos.
Tal como una comedia musical las artistas en escena (vida real) pasan del canto al diálogo de forma fluida y consciente, interrogan a los que pasan por allí para que nosotros reflexionemos (y quizás ellos se sumen al encuentro). Inventan historias, vidas y crean momentos, ese que no nos damos cuenta que vivimos, ese que ya pasó y extrañamos, dando por sentado el que viene, sin siquiera considerar el presente.
Desde las banquetas del sector de espectadores disfrutamos de la música, la elocuencia de las canciones mientras empezamos a sentir la falta de techo que nos brinda la intemperie (recomendamos llevar mucho abrigo) y los sentidos abiertos para encontrarse en comunidad.
Las voces femeninas recorren tonos y melodías que creíamos imposibles, que llaman nuestra atención mientras que llenan el espacio y nos hacen olvidar de las motos y los autos que pasan cerca. Ellas interpelan a todos los que pasan por los alrededores del espacio dejando a los espectadores en el lugar de reflexión y asimilación.
Luego del disfrute del tiempo exterior nos invitan a ingresar al espacio recordando que el objetivo es el disfrute la libertad que nos une o nos aleja del espectáculo. En el hall de entrada, junto a la escalera interior, nos sentamos en sillas y almohadones para recibir un momento más experimental, artesanal que nos lleva a través de fotografías e imágenes fílmicas a los recuerdos creados a través del momento presente.
La música suena gracias a la cuarta integrante femenina que se sienta en una esquina superior de la escalera difundiendo el sonido de su guitarra. Las tres artistas que iniciaron la obra juegan con una cámara en vivo que se proyecta en la pared y elementos que salen de una maleta que se mezclan los imágenes pre grabadas. El recorrido del relato es abarcador finalizando con una nueva invitación de cambiar de espacio, de salir a la calle recordándonos de disfrutar o ejercer la libertad (que muchas veces olvidamos).
De esta forma salimos a recorrer las calles y finalizar el momento con más música, en un espacio totalmente diferente en el cual comenzó habiéndonos vinculado con la duda, la intriga, la intimidad y la popularidad del barrio de Abasto.
Por Flor Carrasco
SINOPSIS
Cinematique Abasto pretende lo imposible: suspender el tiempo, convertir la ciudad vivida en una ciudad soñada, o mejor aún, en una invención colectiva e imaginante, una obra sin autor que se detenga a imantar el presente que compartimos hasta volverlo imprescindible.
Este espectáculo es con entrada a colaboración. Contamos con tu apoyo para poder sostener el trabajo de lxs artistas, lxs técnicxs y el teatro. Te recordamos que una entrada de teatro independiente cuesta entre 2000 y 4000 pesos. Al final de la función, podés colaborar con este proyecto con efectivo, o a través de MercadoPago: "Transferir dinero" >> ALIAS: CINEMATIQUEABASTO.MP
FICHA TÉCNICO ARTÍSTICA
Dramaturgia: Gonzalo Bao, Francisco Castro Pizzo, Juan Coulasso, Dana Crosa, Milva Leonardi, Delfina Oyuela, Micaela Tapia
Performers: Dana Crosa, Delfina Oyuela, Micaela Tapia, Denisse Van Der Ploeg
Canciones: Dana Crosa, Milva Leonardi, Delfina Oyuela, Micaela Tapia
Operación de sonido: Félix Land
Asesoramiento de vestuario: Uriel Cistaro
Asistencia de dirección: Gonzalo Bao, Nadia Gómez, Delfina Oyuela
Producción ejecutiva: Cinematique Abasto, Micaela Zaninovich
Dirección: Francisco Castro Pizzo, Juan Coulasso
Composición Musical: Dana Crosa, Milva Leonardi, Delfina Oyuela, Micaela Tapia
Gallo 764
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
https://www.instagram.com/rosetiespacio
Sábado - 16:00 hs