Entrevista Agostina Luz López (Jardín Fantástico)
Sinopsis
Un grupo de adolescentes decide dejar de lado sus familias para reunirse en una casa-jardín con el fin de inventar y experimentar una nueva forma de vivir juntxs.
Jardín fantástico es una escritura en voz alta de este grupo de estudio, un diario íntimo colectivo donde se postulan pensamientos adolescentes sobre qué es la amistad, la familia y el amor.
Una instalación en un espacio real que utiliza la fantasía para ensayar nuevas realidades que se proponen como alternativas frente a este mundo herido.
¿Cómo fue el proceso de trabajo con adolescentes, cuánto tiempo llevó realizar la obra y cuáles son los principales deseos y objetivos?
El proceso de jardín fantástico fue largo. Un proceso artesanal en el que primero conocí a las personas con las que íbamos a armar la obra, para después sumergirme en el hilvanado de las escenas. Lo que me interesa de las chicas es la energía propia y singular de cada una, me interesan las personas y no tanto los actores. Me interesa que vayan desde un lugar real y genuino, por eso en ese sentido fue fácil el trabajo con ellas ya que naturalmente van hacía ese lugar sin esfuerzo. El objetivo es armar este clima mágico en el jardín, en el que ellas hacen sus ritos de paso de pasar de la infancia a la adolescencia. El deseo es que la gente pueda conectar con la naturaleza del jardín y de las chicas.
¿Cuáles considerás que son los aprendizajes que podemos llevarnos al observar esos deseos adolescentes?
Lo que más me fascina es la posibilidad de ir hacia lugares propios sin forzar. Como no hay lugares tan construidos de la personalidad, de la vida armada, hay una flexibilidad muy hermosa para también incorporar a nuestra vida.
El jardín y Zalaya parecen un 2 en 1, ¿qué proponen la obra y el espacio en plena zona de Abasto?
La obra propone un recorrido por todo el espacio de Zelaya: la casa, el jardín y la sala de teatro y cine. En ese sentido, ellas ocupan todo, habitan cada parte. La obra propone observar y ser parte de ese recorrido, un arco que va desde la reflexión sobre el crecer, el bautizarse con una nueva identidad, el jugar en el jardín, dejar los peluches de su infancia, convivir entre pares y con la naturaleza. Es una instalación en un espacio real con adolescentes reales.
La amistad, la familia y el amor son grandes temáticas universales, ¿cómo podemos vincular la adultez con esa adolescencia de la obra?
La adolescencia es una edad muy apasionada, y donde al mismo tiempo, hay algo que no está muy fijo y donde también surge esta sensación de ser una banda, una bandada. A mí se me venía la imagen de ellas como una bandada de pájaros, los movimientos se van uniendo entre ellas armando figuras. Es una especie de imán, de magnetismo.
Creo que todo el tiempo vivimos en momentos de transición, de pasaje. Me interesa indagar en la posibilidad de cada vez más ritualizar nuestra vida, darle más encanto, más magia. La obra funciona como un rito de paso que consta de distintas prácticas. Es también la posibilidad de espiar a estas chicas por un rato, ser testigos de esa fragilidad, de esa fuerza, de esa energía arrolladora de aquello que recién está comenzando.
Ficha artística técnica
Actúan: Antonia Brill Perrotta, Catalina Burak, Sofía Guerschuny Pesci, Giulia Heras, Jacinta Perez Berch, Carolina Paula Rojas, Catalina Pietra, Noah Salamanca Tola, María Luz Silva, Lina Ziccarello.
Vestuario: Mariu Fermani
Arte: Mariana Tirantte
Asistente de arte: Imanol López
Luces: Leandro Orellano
Video: Vladimir Durán y Maximiliano Passarelli
Asistencia de video: Sofía Martínez Durán
Fotos: Ignacio Iasparra y Mariana Papagni
Foto de afiche: Mariana Papagni
Diseño gráfico: Catalina Perez Andrade
Prensa: Marisol Cambre
Asistencia de dirección y colaboración dramatúrgica: Ana Montes
Producción: Poppy Murray
Texto y dirección: Agostina Luz López
Funciones: sábados y domingos a las 18.30 horas
Zelaya 3134 - Abasto - CABA
Entradas por Alternativa teatral
Entrada: $1200 - Duración: 70 minutos
Hasta el 13 de noviembre